Mostrando entradas con la etiqueta Entrantes. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Entrantes. Mostrar todas las entradas

CREMA DE CAMEMBERT CON NUECES Y PISTACHOS





Puedo asegurar que de las cosas que más me gustan de una buena mesa, son sus entrantes. De hecho, cuando llega el plato fuerte ya no hay demasiada hambre.

En época navideña suelo deleitarme más todavía, así que en medida de los posibles suelo preparar cositas nuevas cada año y en especial los untables, ya que me pierden!!! pero no por ello descuido el resto del año.
Pues bien, aquí vengo con una crema de camembert con nueces y pistachos, porque quien le dice que "no" al queso con frutos secos?

Podeis hacer una cantidad única y presentarlo en un solo recipiente y que cada comensal coja a su antojo o bien en formatos individuales que suele ser mucho más vistosa para todos los invitados.
En este caso las medidas que os dejo es para 3 tarritos de 125 gr. pero podéis duplicar las medidas tanto como queráis.


INGREDIENTES

150 gr.de crema de queso camembert.
160 gr. de queso de untar natural.
50 gr. de nata de 35% de M.G.
40 gr. de pistachos pelados.
40 gr. de nueces peladas.


PREPARACIÓN

Picamos ligeramente los frutos secos con un robot indicado par ello o bien a cuchillo como he hecho yo. No es necesario hacer los trocitos muy pequeños ya que la idea es encontrarselos con la crema.

En un cazo amplio calentamos los dos quesos con la nata hasta que se fundan pero sin que llegue a hervir. Retiramos del fuego y trituramos con una batidora.
Añadimos los frutos secos a la mezcla del queso y seguidamente rellenamos los tarros o recipientes donde los vayamos a servir.
Dejar en la nevera hasta el momento de llevar a la mesa.
Podemos acompañar esta crema con tostaditas.

 




                                   
Otra opción puede ser la de conservarla a largo plazo realizando el vacío en los tarritos. Para ello debemos esterilizar previamente los envases como he explicado en alguna receta anterior (pero os haré recordatorio) rellenarlos hasta que falte un dedo aprox. antes de llegar al borde y cerramos bien la tapa.

Colocamos los tarros dentro de una cazuela, los cubrimos totalmente con agua fría y la ponemos al fuego.
En la base es aconsejable colocar un paño fino de cocina para que los tarros no toquen tan directamente con la cazuela y corran el riesgo de romperse.
Una vez empieza a hervir el agua, bajaremos el fuego a una temperatura media-baja y dejaremos cocer 30 minutos.
Pasado este tiempo apagamos el fuego y retiramos al mármol pero no sacaremos los tarros hasta que el agua no haya adquirido la temperatura ambiente.

Cuando esté a una temperatura óptima el agua, sacamos los tarros de la cazuela y los dejamos enfriar totalmente sobre un paño de cocina y seguidamente ya podemos guardarlos en un lugar oscuro, fresco y seco, no es necesario en la nevera, pero también está la opción.
Podremos consumir desde ese momento nuestra crema e incluso puede durarnos unos cuantos meses ya que se trata de una conserva envasada al vacío como cualquier otra realizada con el mismo sistema.

Que disfruteis de esta delícia tan selecta y tan sencilla de hacer.
Buen provecho!!!
                                                                                                                       

   






















CROQUETAS DE JAMÓN IBÉRICO






Las croquetas son de los entrantes que más me pierden, no puedo evitar que se me vayan los ojos detrás de un buen plato de croquetas caseras...es superior a mis fuerzas!!! 
Su fama es mundial y para ello se ha adjudicado un día al año para celebrar su existéncia, el día 16 de enero es el "Día de la Croqueta" y pese a ser un producto tipicamente español, se puede saber que su origen es francés pero mucho más popular es en Sicilia o Países Bajos.

En la receta de hoy he puesto mucha ilusión (al igual que en todas las demás) pero he de decir que son "las niñas de mis ojos".
Podéis hacer croquetas de muchos tipos, de pescado, de carne, de verduras, de queso, setas o bien de aprovechamiento, pero de vez en cuando un caprichito de este tipo con un jamón del "Bueno Bueno" se ha de hacer.
Sin demorar más la espera os dejo este recetón, que inspirado en la clásica receta de Alberto Chicote, ha hecho que en mi casa se vivan momentos muy felices cuando las sirvo a la mesa...



INGREDIENTES

Para 20 croquetas aproximadamente (si queréis más cantidad solo tenéis que adecuar las medidas aumentando el peso de todos los ingredientes).

670 ml. de leche entera.
330 ml. de nata (a poder ser de 35.1% materia grasa)
1 hueso de jamón ibérico u otro tipo pero de calidad.
55 gr. de mantequilla.
45 gr. de aceite de oliva virgen extra.
165 gr. de cebolla picada. 
95 gr. de harina de maicena.
100 gr. de jamón ibérico.

Para el rebozado

2 huevos grandes.
Harina de trigo.
Pan rallado.



PREPARACIÓN

En primer lugar pondremos la leche y la nata a hervir con el hueso de jamón durante 20 minutos aprox. a fuego suave, una vez haya pasado este tiempo la retiramos del fuego y la reservamos. 
El hueso de jamón lo limpiamos previamente de cualquier resto de grasa y corteza. Es mejor limpiarlo bien para evitar excesos de grasa y acabe resultando más suave , sino, podéis arriesgaros a que su sabor sea tan intenso que no agrade a todos los paladares.

En una cazuela amplia ponemos la mantequilla con el aceite y calentamos de forma moderada añadiendo la cebolla que habremos picado muy finita (podemos usar la picadora de la batidora para triturarla).
Cuando la cebolla está transparente añadimos el jamón picado en trocitos muy pequeños rehogandolo todo unos minutos, dos o tres aprox.
Una vez rehogado el jamón, añadimos la mezcla de leche y nata reservada (habiendo quitado el hueso de jamón) poco a poco y vamos removiendo con una cuchara de madera para que no se formen grumos de harina. 
Una vez incorporada toda la leche a la cazuela y habiendo obtenido una masa fina y suave, cocinamos unos 10 minutos más removiendo con la cuchara de madera sin parar a fuego moderado vigilando que no se pegue en el fondo. Esta cocción es importante para que la harina se cocine y no tenga sabor a cruda.
Rectificamos de sal, añadimos un poquito de pimienta negra molida y un poco de nuez moscada (seremos muy prudentes porque un sabor excesivo de nuez moscada podría arruinar nuestras croquetas).

Retiramos del fuego y colocamos la masa en un recipiente bajo y ancho cubriendolo con film transparente que deberá de estar en contacto con la masa para no generar una capa en la superfície.
El recipiente lo pondremos dentro de la nevera de un día para otro a poder ser o bien unas horas, lo suficiente hasta que enfríe bien y poder manipular la masa sin problema. 


                      

Hacemos nuestras croquetas untandonos las manos con aceite (para que no se nos pegue la masa en la mano) tomando porciones de masa del tamaño que consideremos adecuado y le daremos forma ovalada de croqueta, también podemos ayudarnos de dos cucharas sin necesidad de tocarlas directamente con las manos.


                   

Pasamos las croquetas por harina (que previamente tendremos en un plato hondo) sacudimos el exceso de esta, las pasamos por huevo batido que también habremos preparado previamente y para finalizar las rebozamos en abudante pan rallado.

En una sartén amplia ponemos aceite de oliva virgen de forma abundante, la cantidad adecuada para cubrir la altura de las croquetas y dejaremos calentar bien. 
Una vez adquirida la temperatura ideal para freir las croquetas, las ponemos dentro del aceite y dejamos dorar dándoles la vuelta con mucho cuidado.
Una vez fritas las dejamos escurrir sobre un plato con papel absorvente para eliminar el exceso de aceite y ya las tendremos listas para servir.

Tenéis la opción de congelarlas, para ello las colocamos en una bandeja de tamaño adecuado que pueda entrar en el congelador, yo utilizo las de cartón para tartas. 
Una vez bien congeladas las podremos guardar en bolsas de congelación u otro tipo de bolsa unas sobre otras para optimizar espacio en el congelador y ya estarán listas para consumir en el momento que deseemos.
No hará falta descongelarlas antes de su uso, se podrían romper al freírlas, directamente las echamos en el aceite bien caliente hasta que estén listas.


                           

Espero que disfrutéis tanto de ellas como yo...ya estoy pensando mi siguiente receta de croquetas y creo que no os voy a decepcionar, más bien a sorprender...

Buen provecho!!!


                           

                           






















MOUSSE DE PIMIENTOS DEL PIQUILLO



Para comenzar la semana os traigo esta receta suave, deliciosa y más sencilla que cualquier otra que os haya podido ofrecer, ya que en tan solo 8 minutos de cocción estará lista para llevar a la mesa.

Esta vez os deleito con una receta hecha en microondas, todo que he de decir que soy una apasionada de la cocina tradicional con su sarten, cazuela y cuchara de palo, que me resisto a cocinar en robots de cocina por muy sofisticados y tentadores que sean...mientras pueda, cocinaré con mi horno y utensilios más clásicos, pero bueno, tampoco me cierro en banda para probar cosas nuevas aunque sea de forma puntual.
Pues bien, toda una novedad para mi cocinar en microondas después de muchísimo tiempo y la sorpresa ha sido bastante satisfactoria...por tanto, la he de compartir con vosotros. 

Probad y me decís...apuesto que quedareis maravillados como yo.


INGREDIENTES

1 bote de pimientos del piquillo.
200 ml. de nata líquida para cocinar (puede ser vegetal).
3 huevos grandes (eco a ser posible, son los que yo utilizo).
3 rebanadas de pan de molde sin corteza (puede ser integral).
3 cucharadas de tomate frito (si es casero mucho mejor, yo lo he hecho en casa).
2 cucharadas de aceite de trufa.
2 cucharaditas de pimentón de la vera (yo uso el dulce ahumado, pero podéis usar el normal sin ahumar o bien el picante pero tan solo sería 1 cucharadita rasa).
Sal.
Pimienta.
Orégano.


Para decorar

Cebollino en rama.
Pimentón de la vera.
Aceite de trufa.



PREPARACIÓN

Ponemos todos los ingredientes en un recipiente amplio y batimos bien con la batidora. Una vez conseguida nuestra mezcla que ha de estar bien triturada, la verteremos en un molde de silicona multicavidades previamente engrasado con aceite de oliva.

Para engrasar el molde, nada mejor y más práctico que un pincel de silicona de repostería, lo mojáis en aceite que habréis puesto en un vasito y pinceláis a vuestro gusto todos los rincones del molde.
Tenéis que tener presente que dicho molde ha de caber dentro del microondas.
Yo he utilizado un modelo de la marca Silikomart que podréis encontrar en vuestra tienda física favorita o bien por internet. Yo suelo comprar en Amazon y el resultado es inmejorable (no me llevo comisión por hacer el comentario jajajaja).
Os dejo el enlace para que podáis acceder al lugar indicado y consultar. Haz clic AQUÍ

Al rellenar nuestro molde con la mezcla, recordad que no han de estar los huecos llenos hasta el máximo, porque al cocer siempre sube un poco y puede desbordarse, así que mejor llenarlos en 3/4 partes.
Introducimos el molde dentro del microondas y cocinamos unos 8 minutos a potencia de 800W. Si vuestro micro es antiguo y no podéis seleccionar la potencia, recomiendo que miréis instrucciones y que lo pongáis al 80% de su total y probéis con 8 minutos, lo sacáis y comprobáis la cocción pinchando con un palito de madera o metal. 
En caso que aún esté un poquito crudo lo coceremos más, id aumentando de minuto en minuto para que no se os queme, aunque más de 10 minutos en total no debería de hacer falta. 

Una vez finalizada la cocción, sacamos con cuidado nuestro molde del interior del microondas sin quemarnos y pasados unos dos o tres minutos, desmoldamos en una bandeja y decoramos con unas ramitas de cebollino, pimentón picante de la vera y espolvoreamos sobre los mousse con un spray de cocina un poquito de aceite de trufa.

Aconsejo consumirlos templados ya que están en su punto más optimo, pero si se enfrían algo más tampoco importa, están de "toma pan y moja"
Resultan ser unos aperitivos riquísimos y untados en tostaditas de cebolla o de finas hierbas intensificareis su sabor aún más, pero si los queréis como plato principal, entonces los serviremos acompañados de una buena ensalada.

Espero que os guste esta super sencilla receta, hoy si que puedo garantizar un éxito con el mínimo tiempo indispensable en vuestras cocinas.

Buen provecho!!!!






MOUSSE DE QUESO DE CABRA CON NUECES





Llevo pensando en hacer esta mousse algunas semanas y nunca veía el momento adecuado...pues bien, llegado el día puedo decir que es de las cosas más rápidas y sencillas que se puedan hacer en cocina.
Si tu perdición son los quesos y los de cabra más aún (sobretodo el de rulo para ensaladas) esta es tu receta.
Ideal como entrante en una comida o una cena, perfecto en cualquier ocasión ya que no es necesario que sean días especiales, pero aún así es una opción perfecta si piensas incluirlo en un menú de celebración, pueda ser un cumpleaños, una cena romántica o incluso para un menú navideño... así que sin más os dejo esta riquísima receta que es todo un vicio, sabes cuando empiezas pero nunca cuando vas a parar y si lo maridas con un vino blanco de toque afrutado buuuffff eso ya son palabras mayores!!!


INGREDIENTES

200 gr. de queso de cabra natural y fresco (yo he comprado el de medallones marca mercadona) también se puede utilizar cualquier queso crema.
200 gr. de nata líquida para montar.
50 gr. de nueces (podemos usar avellanas, almendras, etc...)
4 hojas de gelatina (o 3/4 de sobre de gelatina neutra en polvo).
1 cucharadita de sal fina.
Pimienta molida.
Cebollino para decorar.
Tostadas de aperitivo.


PREPARACIÓN

Trituramos las nueces con la picadora o batidora hasta que queden reducidas a harina. Reservamos algunas enteras para decoración.
Montamos la nata hasta que quede bien consistente y reservamos.

Quitamos la corteza al queso si usamos el de rulo y lo ablandamos en el microondas unos 15 o 20 segundos y seguidamente lo batimos bien junto con las nueces trituradas, la sal y la pimienta.
Hidratamos la gelatina en agua caliente durante 10 minutos aproximadamente hasta que estén bien blanditas y las escurrimos. Las pondremos en el microondas unos segundos, lo justo para que se deshagan por completo y las añadimos a la mezcla anterior reservada e integramos bien todos los ingredientes.

Finalmente añadimos la nata montada y reservada con movimientos envolventes con una cuchara de palo intentando hacerlo con mucho mimo para que no se baje la mezcla. En caso de que nos quede demasiado densa, podemos aligerarla un poco con nata líquida y ya obtenido el punto exacto y a nuestro gusto, lo tapamos y dejamos en la nevera para que enfríe bien.

Servimos nuestra mousse acompañada de tostaditas, tenemos variedad para escoger pero hay un tipo que son especiales para los patés que tienen pasas o frutos del bosque, estas quedaran de maravilla por su contraste de sabores.
Decorar con un trocito de nuez entera encima de cada tostadita untada y unos trocitos de cebollino picado para aportarle un toque fresco al paladar.

Solo queda la opinión de vuestros comensales que apuesto que será mucho más que excelente!!!
Espero que disfrutéis esta receta al igual que todas las que os ofrezco aquí en el blog.

Buen provecho!!!















PASTEL FRÍO DE MARISCO







Os presento un clásico de nuestra cocina, un pastel frío de marisco que abarca cualquier estación del año, sea verano o bien en época invernal para fiestas de navidad...quien no ha hecho un pastel de este tipo como entrante en alguna reunión familiar o con amigos??....que aún no has probado a hacerla por ti mism@?? pues no esperes más y ponte manos a la obra, que en cuanto se prueba una vez se convierte en un indispensable de tu mesa...


Como veréis a esta receta yo le he puesto salsa rosa, hay quien utiliza solamente mayonesa, pues bien, eso va a gustos y podéis optar por elegir lo que más se adecue con vuestro paladar. 

En relación al pan de molde, yo lo compro en forma rectangular en el super o bien en la panadería, pero si no es posible, se puede hacer con pan de molde cuadrado normal colocando capas unas al lado de otras hasta llegar a la longitud deseada...pero ojo!!! eso sí, siempre sin la corteza.

He de decir que esta receta es algo calorica, así que con una ración un poquito más pequeña también podemos disfrutar de ella sin tener que renunciar al placer...





INGREDIENTES


1 paquete de pan de molde en lonchas rectangulares (puede ser cualquier marca).

4 huevos cocidos para el relleno (1 huevo para la decoración de la superficie y 8 de codorniz para decorar los laterales de la bandeja).
1/2 kilo de langostinos cocidos. Añadir 6 u 8 más pero estos reservarlos para la decoración.
12 barras de surimi.
Salsa rosa (la podemos comprar hecha o bien hacerla nosotros). Puedes consultar como hacer salsa rosa en el apartado de "Varios" en este blog. 
Lechuga para decorar (opcional).


PREPARACIÓN



En primer lugar prepararemos el relleno, si lo hacemos el día de antes será mejor ya que los sabores serán más intensos, pero bueno, hemos de adaptarnos a los horarios que tenemos y sin problemas lo podemos hacer en el momento con un resultado espectacular.

En un bol amplio ponemos los 4 huevos picados, seguidamente añadimos el surimi y los langostinos bien picados también. Añadimos unas 4 o 5 cucharadas de salsa rosa (al gusto de cada uno) no hemos de excedernos ya que el pan va untado de salsa también, si abusamos de ella puede llegar a empachar.


Para formar el pastel, podemos hacerlo directamente en la bandeja en la que vayamos a presentarlo en la mesa. Ponemos unas tiras de papel de aluminio de tal manera que una vez puestas las rebanadas de pan, estas se apoyen sobre una parte del aluminio para que cuando decoremos el pastel, podamos hacerlo sin miedo a manchar la bandeja. 


Una vez puesto el papel, colocamos una loncha de pan de molde y la untamos con salsa rosa. Sobre ella colocamos una porción de relleno que extenderemos de forma uniforme. Lo tapamos con otra loncha de pan y repetiremos el proceso. Yo he puesto 5 capas de pan y 4 de relleno, eso variará en función de la marca que compréis, ya que cada una tiene su longitud.

Una vez puesta la última capa la untaremos con salsa rosa por encima así como los laterales del pastel también. Rallaremos en la superficie el huevo que hemos reservado y en fila horizontal pondremos los langostinos que teníamos reservados para decorar. Retiramos el papel de aluminio y daremos un toque de color en los laterales de la bandeja con unas hojas de lechuga picadas bien finitas (este paso es opcional) y sobre ellas colocamos los huevos de codorniz reservados y cortados de forma longitudinal.  


Doy por hecho que much@s de vosotr@s ya habréis hecho este plato más de una vez, pero a quien aún no se ha aventurado le puedo asegurar que es una receta muy sencilla y que agrada tanto a pequeños como a adultos, además de vestir muy bien vuestra mesa en cualquier ocasión...así que espero que os haya gustado y desearos éxito en vuestros eventos gastronómicos con familiares o amigos...

Buen provecho!!!!









QUICHE DE BACALAO Y PUERROS







Mi pasión por las tartas saladas no tiene límite, se pueden hacer servir como aperitivo o plato principal, son muy versátiles y aceptan tantas variedades como imaginación le podáis poner, sea en versión dulce o salada.

Hoy os quiero dedicar una Quiche con masa quebrada totalmente casera, si si, con masa casera incluida. No tiene nada que ver con las del supermercado aunque sean las de pasta fresca, probad y veréis lo fácil que es de hacer, la podéis preparar el día anterior y conservarla en la nevera hasta la hora de hacerla, entonces será cuestión de sacar la masa, estirarla con el rodillo, forrar el molde y hornear 10 minutos previamente antes de rellenarla con lo que más os guste (en este caso con bacalao) veréis el éxito que tenéis en casa, además de ser muy sencilla de elaborar y deliciosa.

El tipo de molde puede ser redondo o rectangular. Yo me he decantado por la segunda opción y en cuanto a marcas yo he usado la de "Kitchen Craft Master Class" que lo he encontrado en Amazon. El material es bueno, resistente y ajustado de precio, pero si optáis por cualquier otra marca os recomiendo que tenga la base desmontable porque será mucho más práctico (aunque no indispensable).
El molde que veréis en la foto es de 36 x 13 cm. Para acceder a la página haz clic AQUÍ.
Vamos a por la receta sin más rodeos!!!


INGREDIENTES (PARA DOS MOLDES DE TARTA RECTANGULAR)

Para la Masa Quebrada:
220 gr. de mantequilla sin sal.
390 gr. de harina normal.
1 cucharadita de sal.
50 ml. de agua bien fría.

Para el relleno:
200 gr. de cebolla cortada en juliana.
300 gr. de puerro cortado en rodajas finas.
2 dientes grandes de ajo.
400 gr. de bacalao desalado y desmigado.
80 ml. de vino blanco.
Aceite de oliva.
1 nuez de mantequilla.
Sal y pimienta.
3 huevos "L".
200 ml. de nata de cocinar (15-18 % MG)

PREPARACIÓN

Comenzamos desalando el bacalao, aconsejo que sean trozos de lomo ya que cuanto mejor sea la calidad, más buena saldrá nuestra tarta. Los tendremos unas 48 horas en agua cambiándola dos o tres veces al día y manteniendolos en la nevera, seguidamente desmigamos el bacalao asegurándonos que no tengan ninguna espina y reservamos. Otra opción es comprar el bacalao desalado en algún lugar de confianza y comprobar que el punto de sal es el adecuado.

Vamos a elaborar la masa quebrada, que podréis comprobar lo sencilla que es. En un bol grande tamizamos la harina y añadimos el azúcar y la sal, seguidamente rallamos la mantequilla bien fría con un rallador de agujero grande y una vez rallada comenzaremos a mezclar los ingredientes con las manos hasta conseguir una textura como de migas, pero que no queden grumos grandes, tardaremos unos minutos. Una vez obtenido este punto vamos añadiendo el agua fría con una mano y amasando con la otra. Con paciencia iremos integrando bien el agua a la masa hasta obtener una bola lisa y fina. Daremos la forma redonda a la masa si la vamos a hornear en un molde redondo, pero si va a ser en uno rectangular le daremos forma cilíndrica. Envolvemos la masa en un film transparente y lo dejaremos un par de horas en la nevera antes de utilizar o bien lo dejamos toda la noche si la vamos a utilizar al día siguiente.

Precalentamos el horno a 180º arriba y abajo.
En una sarten o cazuela ponemos el aceite y la nuez de mantequilla y rehogamos la cebolla y el puerro a fuego medio durante unos  10 o 12 minutos. Añadimos el ajo y pasados un par de minutos más vertemos el vino subiendo el fuego para que se evapore el alcohol. A continuación añadimos el bacalao desmigado y rehogamos hasta que veamos que está hecho.
Salpimentamos y reservamos fuera del fuego.

En un bol aparte batimos los huevos y añadimos la nata, una pizca de sal y pimienta.
Sacamos la masa de la nevera y la cortamos en dos (ya que es la medida para dos moldes) la pondremos sobre un papel de horno y cubrimos con otro papel y con la ayuda de un rodillo estiramos la masa apretando suavemente hasta dejarla de un grosor de medio centímetro aprox. (no ha de ser gruesa pero tampoco demasiado fina, ya que ha de soportar el peso del relleno y sobretodo no romperse a la hora de manipular en el molde).
Si la masa la utilizamos al día siguiente, la sacaremos unos 15 minutos antes de estirar para que no esté excesivamente fría.

Una vez estirada la masa la enrollamos sobre el rodillo y trasladamos hasta el molde, entonces desenrollamos sobre él y vamos colocando la masa, apretando suavemente sobre el fondo y las paredes. Recortamos los bordes de masa sobrante con un cuchillo o pasando simplemente el rodillo por encima del molde y quedará seccionada.
Importante no engrasar el molde en ningún caso, ya que la masa lleva mantequilla suficiente como para no engancharse.
Pinchamos con un tenedor la masa y cubrimos con papel de aluminio fondo y paredes presionando para darle la forma del molde. Colocamos sobre el papel de aluminio una capa de garbanzos secos para que hagan de peso y evitar que suba la masa y horneamos de 10 a 12 minutos o hasta que veamos la masa seca.

Con la otra mitad de la masa haríamos exactamente lo mismo, estirar con el rodillo, hornear con el peso y una vez fuera del horno quitamos el papel con los garbanzos y reservamos.
En caso de querer solamente una Quiche podéis estirar un trozo de masa y reservar la otra parte de ella con un film transparente en el congelador para otro día, entonces si que os recomiendo hacer solo la mitad del relleno en este caso.

Rellenamos la tarta con el sofrito de bacalao y puerro repartiendo muy bien los ingredientes y evitando añadir el jugo que haya podido quedar en la sarten. Seguidamente vertemos la mezcla de huevos y nata colocando la mezcla de forma homogénea para que quede bien repartido.
Horneamos durante 25-30 minutos o hasta que veamos que el relleno está bien cuajado y algo doradito (sin excedernos).
Sacamos del horno y dejamos reposar unos minutos antes de servir en la mesa. Si el molde es desmontable lo podemos sacar con cuidado con la ayuda de una espátula adecuada en una bandeja y ya estará nuestra deliciosa y suculenta Quiche de Bacalao con Puerros.

Espero que os guste y que seáis los reyes y reinas de casa para vuestros comensales, seguro que los conquistareis.
Buen provecho!!!!











































SALMOREJO CORDOBÉS



Otra delicia del verano es el Salmorejo, una crema fría típica del sur de nuestro país, tiene dos formas de preparación, majándolo con paciencia en un mortero o bien con batidora o robot de cocina.
La receta tradicional se basa tan solo en cuatro ingredientes, tomate, pan de telera (pero al no estar en el sur usaremos otro tipo de pan) aceite de oliva virgen extra, ajo y sal, aunque para finalizar añadiremos unos tropezones buenísimos que darán el toque estrella al plato.

Las medidas son para 6 raciones generosas.


INGREDIENTES

1 kg de tomates maduros.
200 gr de pan de telera cordobés o en su defecto pan blanco normal o candeal (preferiblemente pan del día anterior o duro).
250 gr de aceite de oliva virgen extra (AOVE).
1 diente de ajo grande.
1 cucharadita de sal.

Para acompañar:
Jamón Serrano picado.
Huevo duro picado.


PREPARACIÓN

Aconsejo mezclar los ingredientes de uno en uno para poder conseguir la textura deseada, aunque el salmorejo ha de quedar denso, hay quien lo prefiere algo más ligero de textura.
Lavamos los tomates y los pelamos (en caso de disponer de thermomix no haría falta ya que quedaría totalmente triturada la piel y no se notaría), seguidamente los troceamos y trituramos con la batidora o robot de cocina.

En un bol aparte colocamos el pan troceado y lo cubrimos con el puré de tomate dejándolo reposar unos 10 minutos aproximadamente para que el pan se impregne y se vuelva blandito.
Pasados los 10 minutos añadiremos el ajo y trituramos bien y con paciencia hasta obtener una crema lo más fina posible.

A continuación incorporamos el aceite y la sal y de nuevo trituramos la crema.
Es importante seleccionar un buen aceite para conseguir una emulsión perfecta y un resultado bien cremoso.
Batiremos nuestro salmorejo unos minutos más para asegurarnos que estan bien triturados todos los ingredientes y hasta conseguir un bonito color anaranjado que ese es el correcto.
Ahora es el momento de probar y matizar los sabores en caso de añadirle más sal o ajo, cada paladar es distinto y se ha de adecuar al gusto personal.
La textura puede variar en función del agua del tomate, sino os gusta tan espeso el salmorejo podéis añadirle un poquito de agua, pero recordad que su textura es cremosa y no como un gazpacho.

Colocamos el bol del salmorejo en la nevera bien tapado y lo dejamos enfriar. Mientras picaremos unas tiras de jamón serrano y coceremos unos huevos que posteriormente pelaremos y picaremos finitos.
Para servir el salmorejo lo haremos en platos independientes o bien en bol, colocamos en la superficie el jamón picado y el huevo duro al gusto, yo reconozco que lo prefiero con abundancia pero eso lo dejo a vuestra elección. Finalmente regaremos cada ración con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y servimos de inmediato para que esté bien fresquito.

Bueno, espero que os guste este plato al igual que todos los demás que os propongo en mi blog, la verdad que es una receta rápida, sencilla y muy refrescante y si la hacéis con mimo y mucho cariño como yo la hago, os quedará buenísima!!!

Buen provecho!!!!!


GAZPACHO ANDALUZ




Con el calor que está haciendo es aconsejable preparar platos frescos, ligeros y a la vez nutritivos...y que mejor que un buen gazpacho casero y hecho con cariño...
Hay muchas versiones de gazpacho, pero yo os traigo la receta tradicional del gazpacho andaluz, podéis modificar el matiz del resultado con un poquito más o menos de algún ingrediente, pero la finalidad es que podáis disfrutar de esta receta que a muchos de nosotros/as nos encanta y tantas veces hemos tomado en casa o incluso restaurantes.
Bueno, aquí os la dejo, espero que la disfrutéis...


INGREDIENTES

7-8 tomates maduros (1,2 kg aproximadamente).
1 pimiento verde mediano (de los alargados).
2 dientes de ajo grandes.
1 pepino mediano.
1 cebolleta tierna mediana.
250 ml. de aceite de oliva.
50 ml. de vinagre de jerez.
100 gr. de pan duro.
250 ml. de agua fría.
Sal.

Opcional:
Un pellizco de comino.
Un trocito de pimiento rojo (yo no lo aconsejo ya que el resultado es demasiado dulzón).


PREPARACIÓN

La preparación del gazpacho es de las más sencillas de la gastronomía mediterránea.
En un bol grande colocaremos todos los ingredientes troceados en la proporción indicada. Añadimos el aceite, el vinagre y el agua triturándolo todo bien fino, sea con la batidora o con la thermomix. Quien disponga de thermomix deberá colocar todos los ingredientes en el vaso y triturar a máxima velocidad durante 4 minutos para obtener la textura perfecta.

Es aconsejable pelar los tomates para no encontrarnos trocitos de piel, en el caso de la thermomix no será necesario, no se notaran ya que el resultado será muy fino.
Ahora es el momento de matizar los sabores ya que cada paladar es distinto, probaremos el gazpacho y añadiremos aquel ingrediente que consideremos que necesita realzar su sabor, también es momento de añadir la pizca de cominos si así lo hemos decidido y le damos otro golpe de batido para finalizar nuestro proyecto.
Vertemos el gazpacho en un recipiente apto para colocar en la nevera (siempre bien tapado para que no se oxide ni pierda propiedades) y lo dejaremos almenos un par de horas para que enfríe bien.

Para degustar el gazpacho en todo su explendor aconsejo hacerlo de un día para otro, de esta forma todos los ingredientes se habrán integrado perfectamente.
Cuando lo llevéis a la mesa podéis hacer unos picatostes de pan frito para decorar o bien un picadito de los ingredientes utilizados.
Un último consejo es el de no añadir hielo una vez hecho ya que el resultado será muy aguado y reduciría la intensidad del sabor.
Espero que os guste y probéis de hacerlo si es que aún no lo habéis hecho, no sólo una vez, sino muchas más ya que en verano resulta ser una receta muy apetecible.
Bon Appetit!!!!

ENSALADILLA CON AGUACATE





Este plato es intemporal, no tiene estación concreta ni se considera que esté anclada en el tiempo, es un éxito asegurado en cualquier momento. Eso sí, el toque de distinción para que sea más atractiva siempre va bien, así que podemos aprovechar algún ingrediente que tengamos en nuestra nevera o bien alguno comprado con toda la intención.
En este caso le vamos a añadir aguacate que le aporta un toque fresco y bastante veraniego, ya que con el calor que estamos disfrutando estos días, no nos merecemos menos.

La receta admite lo que realmente quieras, una buena opción es añadirle a la mayonesa un poco de pimienta y yogur griego ya que le dará un toque más meloso...puedo asegurar que el resultado es buenísimo!!!

Receta para 4 personas.


INGREDIENTES

4 huevos cocidos.
2 aguacates.
Zumo de limón.
2 patatas.
2 o 3 zanahorias.
100 gr. de guisantes frescos (si estamos en temporada).
1 pimiento rojo del piquillo.
100 gr. de bonito en aceite (escurrido).
1 tomate grande o dos pequeños.
Sal.
Pimienta negra.
Aceite de oliva.
250 gr. de mayonesa casera.


PREPARACIÓN

Pelamos las patatas y las zanahorias, las lavamos bien y las cortamos en daditos pequeños. Las cocemos en una olla con agua y sal durante 8 o 10 minutos (no han de estar excesivamente cocidas ya que se podrán deshacer y no nos interesa).
Añadimos los guisantes y cocemos 5 minutos más. Seguidamente escurrimos las verduras y las dejamos enfriar. Reservamos.

Pondremos a cocer los huevos en agua y sal durante 15 minutos, los escurrimos, los pelamos y reservamos también.
Retiramos la carne de los aguacates, la cortamos en daditos pequeños y la rociamos con el zumo de limón para evitar que se oxide.
Cortamos el pimiento menudito. Pelamos los tomates y los cortamos también en daditos y reservamos.
Picamos los huevos (reservando dos yemas para el emplatado).

En un bol amplio mezclamos las hortalizas con el pimiento, los huevos picados, la mitad de los aguacates (la otra mitad la guardamos para emplatar) el tomate y el bonito desmenuzado.
Rociamos con un poquito de aceite toda la mezcla y salpimentamos al gusto.
Añadimos la mayonesa y mezclamos de nuevo.

Podemos servir nuestra ensaladilla en una bandeja adecuada o bien podemos hacerlo de forma individual y más bonita usando un aro de emplatar. Para ello pondremos el aro en el centro del plato, rellenamos con la ensaladilla y presionaremos con una cuchara para que quede bien firme. Una vez relleno el aro, lo quitaremos con cuidado para que no se desmonte.
Para decorar pondremos unos daditos de aguacate reservado sobre la ensaladilla y seguidamente rallaremos las yemas de huevo por encima.
Colocamos una ramita de perejil como último toque.

Bueno, como siempre os animo a que entréis en la cocina y le perdais el miedo...la verdad que es muy gratificante y veréis que es muy sencillo hacer platos ricos.

Bon appettit!!!




























HUMMUS





Hoy os propongo una receta muy típica de la cocina árabe, el Hummus, se trata de un puré de garbanzos que poco a poco ha ido creándonse espacio en nuestras cocinas. Un gran desconocido durante mucho tiempo, pero actualmente se suele encontrar con facilidad en restaurantes o establecimientos diversos, eso sí, nada que ver con uno bien auténtico hecho en casa.
Además, es tan sencillo de realizar que nos puede solventar una visita imprevista a la cual le podemos ofrecer de entrante...mientras, prepararemos el resto del menú. ¿Te animas con el Hummus?...venga, a la cocina!!!

Para 6 u 8 personas

INGREDIENTES

400 gr. de garbanzos cocidos.
1 cucharada de tahin (crema de sésamo, de venta en dietéticas, yo uso el natural).
2 dientes de ajo grandes.
1/3 de cucharadita de sal.
1 cucharada rasa de cominos molidos.
3 cucharadas de yogur griego (sin azúcar).
Zumo de medio limón.
Pimentón dulce de la vera.
Un chorro de aceite.
1/2 vaso de agua.

PREPARACIÓN

Enjuagamos bien los garbanzos si son de bote, sino, no es necesario.
Ponerlos en un bol amplio o en el vaso de la batidora (podemos reservar una cuchara de garbanzos para adornar, es opcional).

Añadimos el ajo picado, la sal, los cominos, el tahin, el yogur y el zumo de limón. Batimos todo con el brazo de la batidora añadiendo poco a poco el agua (la cantidad total de líquido puede ser mitad de agua y mitad de aceite). Añadiremos líquido hasta obtener una mezcla cremosa pero ha de tener cuerpo, no ha de quedar demasiado ligera.
Probaremos el hummus y si consideramos que el punto de sabor no es suficiente, es momento de añadir un poco más de lo que falte hasta adecuarlo a nuestro paladar.

Pondremos el hummus en un bol y con una cuchara presionaremos el centro mientras hacemos un movimiento circular para darle un toque bonito a nuestro plato (como se ve en la foto).
Decoramos con pimentón de la vera sobre el hummus, si hemos reservado garbanzos los colocaremos en la superficie repartidos de forma equilibrada y finalmente remataremos con un buen chorrito de aceite de oliva de calidad y listo!!!
Se suele acompañar con pan de pita, en trocitos y ligeramente tostado y caliente.
A servir y disfrutar.

Espero que os haya gustado y sobretodo que os decidáis a hacer esta receta, es muy sencilla como podéis ver.
Bon appetit!!!

PASTEL MOUSSE DE PIMIENTO ROJO Y ATÚN




Seguro que alguna vez o muchas habéis probado un pastel salado. Hoy propongo una receta muy sencilla y económica, un pastelito mousse salado que podréis hacer cualquier día de la semana o bien en algún momento que tengáis invitados en casa.
Este pastel es muy tierno, tiene una suave textura de mousse que os dará la opción de servirlo como un entrante o bien como un untable.


INGREDIENTES

200 ml. nata líquida de cocinar (si preferimos nata vegetal, una buena opción es la crema de soja).
5 huevos.
2 latitas de atún al natural.
1 pimiento grande rojo asado.
2 cucharadas de tomate frito (a ser posible casero, siempre estará más sabroso).
Pimienta.
Sal.


PREPARACIÓN

En un cazo coceremos dos huevos, los pelamos y reservamos.
En un bol pondremos los 3 huevos restantes, el atún bien escurrido, el pimiento rojo, la nata líquida y el tomate frito. Salpimentaremos al gusto y trituraremos bien con la batidora.
Una vez batido y habiendo obtenido una crema fina, untaremos un molde alargado (yo he hecho servir uno de bizcocho de 23 cm. es recomendable no escoger un molde más largo ya que saldría muy bajito el pastel) verteremos la mezcla reservada y taparemos la parte superior del molde con papel de plata, tendremos que asegurarnos que queda bien sellado en los bordes para que no entre agua a la hora de cocerlo.

En una cazuela amplia colocaremos dentro el molde del pastel, llenaremos de agua la cazuela hasta cubrir un nivel máximo de tres cuartas partes del molde, más no ya que al hervir podría filtrarse agua
por alguna zona del papel.
Poner a cocer al Baño María el pastel a fuego medio, ya que ha de cocer con suavidad durante 40-45 minutos.
Si observamos que durante la cocción reduce mucho el agua, tendremos que añadirle una poca hasta equilibrar el nivel inicial, siempre será caliente para no detener la cocción.
El nivel de agua nunca ha de ser inferior al nivel de masa dentro del molde ya que no cocería igual y podría quedar crudo en alguna zona.

Una vez pasado el tiempo de cocción comprobamos que está hecho pinchando con un palillo largo. Si este sale limpio estará en su punto.
Sacaremos con sumo cuidado el molde de la cazuela y lo dejaremos enfriar sobre un paño el tiempo suficiente para poderlo desmoldar sin que se nos rompa, como mínimo serán unas dos horas.También podemos dejarlo de un día para otro dentro del molde en la nevera y lo desmoldaremos a la hora de servir.
Para decorar rallaremos los dos huevos cocidos reservados en la superficie para darle un toque de color y serviremos en seguida.

Este pastel se puede acompañar con salsa rosa o bien lo podemos utilizar como untable con unas tostaditas.
Espero que os haya gustado, como podéis ver no es nada complicado, así que como siempre os animo a probar y veréis que poco a poco el cocinar es un gran hobbie además de un gran placer.

Buen provecho!!!



CROQUETAS DE POLLO, CEBOLLA Y HUEVO




Sabíais que en el mes de febrero existe el "Día Mundial de la Croqueta"?? si si, el día 16 de febrero ha sido el elegido y yo no iba a faltar en aportar mi granito de arena en esta celebración.
Hay quien hace croquetas muy sofisticadas para participar en concursos y eventos, pero yo os traigo una receta muy preciada para mi, una receta muy especial que siempre se ha hecho en casa, desde muy niña recuerdo que mi madre hacía una buena bandeja de croquetas sobretodo en Navidad y no duraban nada!!! pues con todo mi cariño y buen recuerdo en honor a mi madre, comparto mi receta familiar...

Estas cantidades son para unas 36 croquetas.

INGREDIENTES

2 muslos de pollo (con contramuslo o 2 pechugas).
2 cebollas.
3 huevos.
60 gr. de mantequilla.
Aceite de oliva.
Pimienta.
Sal.
Harina, huevo y pan rallado para rebozar.

Para la bechamel
1litro de leche.
1/2 cebolla.
100 gr. harina Maizena (o harina normal)
80 gr. mantequilla.
Nuez moscada.
Sal.


Poner un cazo con agua y cocer los huevos, pelarlos, picarlos y reservarlos.
Cogeremos el pollo y lo salpimentaremos al gusto y lo haremos a la plancha, una vez haya enfriado lo  picaremos bien pequeñito y reservamos.
Picar la cebolla (no rallarla) y sofreírla en una sartén, una vez bien pochada se escurrirá el aceite y le añadiremos fuera del fuego el pollo picado y el huevo, mezclaremos bien y reservamos.

En una cazuela amplia ponemos la leche, la 1/2 cebolla y la mantequilla, la ponemos al fuego y la dejamos hervir unos dos o tres minutos a fuego lento para que no suba la leche y tampoco se pegue, de esta forma la cebolla dejará el sabor. Pasado este tiempo la apartaremos.

Seguidamente en otra cazuela ponemos la mantequilla y la dejamos fundir a fuego suave, le añadiremos la harina y mezclaremos con energía los ingredientes con las varillas manuales. Veremos que se hace una bola de harina, es normal y sin dejar de remover iremos añadiendo la leche poco a poco hasta que obtengamos la densidad deseada para nuestra bechamel. Aconsejo que sea bastante densa, ha de tener cuerpo y no podemos hacerla como para los canelones ya que no podríamos formar las croquetas.

Una vez tenemos la bechamel en su punto le pondremos sal y nuez moscada al gusto, está última será opcional.
Si nos ha quedado algún grumo podemos pasarle la batidora para dejarla más fina, pero inicialmente no será necesario ya que la Maizena no hace grumos.
Añadir a la bechamel la mezcla reservada de pollo, huevo duro y cebolla, mezclaremos bien y la colocaremos en una bandeja bien extendida y dejaremos enfriar. Una vez templada la taparemos con film transparente y la pondremos en la nevera como mínimo dos horas o bien podemos dejarla de un día para otro.

Cuando vayamos a hacer nuestras croquetas, cogeremos porciones adecuadas y con dos cucharas le daremos la mejor forma posible y entonces las pasaremos por harina, huevo y pan rallado.
En una bandeja amplia espolvoreamos pan rallado e iremos colocando las croquetas, una vez llena la bandeja espolvoreamos de nuevo por encima con pan rallado, tapamos con film transparente y las guardamos en la nevera o bien en el congelador.
A mi personalmente me gusta más congelarlas antes de freírlas porque absorben menos aceite y quedan con un poquito más de cuerpo.

Las podemos acompañar con una buena ensalada, como guarnición con carne a la plancha y patatas, incluso solas son un bocado delicioso que crea adicción, ya que cuando pruebas una es difícil poder frenar!!!

Espero que os haya gustado mi receta y que la probéis aunque sea por una vez, ya me diréis!!!!